Harry Kane siempre ha sido un gran goleador y, durante el Mundial de Clubes FIFA™, ha hecho gala de una enorme calidad. Estas características lo sitúan entre los mejores delanteros centro del mundo. En este artículo, Jürgen Klinsmann, experto del Grupo de Estudio Técnico de la FIFA y, en su día, también en marcar goles, nos ofrece un interesante análisis sobre una característica muy destacable de Kane: su capacidad a la hora de tomar decisiones.
«Decide a una velocidad de vértigo, y su percepción del espacio que ocupa en relación con sus oponentes, independientemente de cuántos sean, es muy aguda. Como siempre sabe dónde está ubicado respecto a la portería, no necesita mirar, y su capacidad técnica le permite rematar con la diestra, con la zurda, de cabeza, de jugada, a balón parado... Nada se le resiste. Es un futbolista muy completo.
»Da la sensación de que puede pasar cualquier cosa cuando el balón se aproxima a su posición. Juega tan concentrado que, en cuanto lo recibe, sabe perfectamente qué hacer en cada momento, y es capaz de llevarlo a cabo. Piensa tan rápido que, como le ocurre al jugador de baloncesto LeBron James, parece que vaya un paso por delante del resto».
Klinsmann, considerado en su día un delantero centro de talla mundial, nos explica qué se siente al jugar en punta.
«El cerebro trabaja a toda velocidad y, al terminar el partido, uno puede llegar a sentirse agotado. No me refiero tanto al plano físico como al hecho de sentirse exhausto mentalmente por la rapidez con la que hay que pensar. Me encanta fijarme en ello, sobre todo en jugadores que rinden a semejante nivel».
Artillero
En el partido de octavos de final entre el Bayern y el Flamengo, Kane fue elegido el mejor jugador del partido. Aunque solo dispuso de dos ocasiones de gol, anotó ambas, lo que pone de manifiesto hasta qué punto puede un delantero centro resultar decisivo, puesto que el equipo alemán se clasificó tras imponerse por 2-4.
En opinión de Klinsmann, «los jugadores como él pueden aparecer en cualquier momento y decantar la balanza de repente; por eso suele costar tanto sustituirlos. La definición de Kane en estas dos jugadas es de una categoría excepcional».
En el primer vídeo, Kane da unos pasos tras el robo de balón de Dayot Upamecano (2), analiza su posición y también la del portero. Nada más recibir la pelota, toma la decisión de girarse, acomodarse el balón con un par de toques y disparar, consciente de que solo puede hacerlo con la zurda.
«Ni siquiera le hace falta levantar la cabeza. De hecho, tiene la mirada clavada en el césped, porque está perdiendo el equilibrio. No obstante, se mantiene en pie y confía lo suficiente en sí mismo como para pegarle con la izquierda, con la precisión y la velocidad justas. Técnicamente es impecable, y resulta asombroso ver cómo sabe dónde está situado y dónde están los demás, así como la manera en que remata con la pierna menos hábil. Otros jugadores hubieran intentado disparar con la derecha o acercarse un poco más, pero esta era la única forma de finalizar. Kane ya era consciente de ello nada más girarse tras la recuperación de Upamecano», explica Klinsmann.
En el segundo vídeo, se analiza principalmente la anticipación del delantero inglés.
«Kane empieza a prepararse desde que su equipo se aproxima al área, mucho antes de que le llegue el balón. Empieza a pedir la pelota desde el principio, cuando su equipo la abre a la banda, y participa en el juego incluso sin balón. Siempre está atento y es muy inteligente: analiza continuamente la situación. Sabe que no le va a costar demasiado rematar, independientemente de si el balón le llega por alto, por bajo o si se tiene que girar. Esta capacidad de análisis denota un gran nivel de confianza en sí mismo. Como delantero centro, dispone prácticamente de una visión de 360 grados en esa zona del campo, y la conexión que mantiene con lo que sucede a su alrededor es tal que le hace sentir invencible».
Un jugador de equipo
A los mejores nueves del mundo se les exige meter goles, pero también tienen que saber cuándo hay compañeros mejor situados para marcar. Kane no solo detecta esto, sino que trabaja para propiciar que sus compañeros rematen a puerta.
Su labor de enganche es fundamental para que el equipo llegue al último tercio y pueda aprovechar los espacios. A menudo retrasa su posición para recibir y sacar a los defensores de su posición, porque sabe que así genera ocasiones para sus compañeros. Su visión, capacidad de análisis y calidad técnica con el balón le permiten ser preciso en zonas de peligro, valiéndose de un amplio repertorio de pases.
Como señala Klinsmann, sus movimientos sin balón, ya sean para recibir o para desmarcarse y abrir huecos a sus compañeros, son fundamentales para generar espacios que luego el FC Bayern aprovecha en ataque.
«En el tercer vídeo, el instinto le dice que, antes de recibir, tiene que controlar a la media vuelta para generar un espacio que le permita librarse del defensor y enviar el balón al desmarque de Kingsley Coman (11). Vemos cómo se comunican antes de que reciba Kane, que no tiene más opción que recibir mientras se gira para poder filtrar el pase. Es un ejemplo de toma de decisiones rápida combinada con una depurada ejecución técnica.
»En el cuarto vídeo, indica con antelación de que tiene espacio para desmarcarse por la banda. Intercambia su posición con la del extremo y genera una situación de 2 contra 1 al arrastrar al central izquierdo del Flamengo. Cuando Joshua Kimmich (6) se interna, Pereira (4) le sigue, lo que libera a Kane para aprovechar el espacio que queda a la espalda de la defensa. Kimmich sigue avanzando, mientras Coman (11) mantiene la posición dentro del área. Kane lo ve y le envía un pase medido al pie, desarbolando así a una defensa que se repliega. Se trata de un buen ejemplo de lo mucho que trabaja para crear ocasiones para sus compañeros. Siempre aporta algo».
Liderazgo
Cuando el Bayern de Múnich no tiene la posesión, Kane trabaja incesantemente por su equipo, encima a rivales, intenta que pierdan el balón con una presión alta y ayuda a crear ocasiones tras una recuperación. Para Klinsmann, la filosofía de trabajo de Kane con y sin balón es una característica distintiva del liderazgo que ejerce constantemente en el terreno de juego.
«Se deja la piel por sus compañeros y nada lo saca del partido. Ya hemos visto cómo elabora el juego y lo decisivo que es para su equipo en fase de posesión. Además, es todo un ejemplo cuando el balón lo tiene el contrario. El quinto vídeo es una buena prueba de ello. Desde el saque inicial, demuestra a sus compañeros que es un líder. Este movimiento lo dice todo: corre inmediatamente a por el balón y hace ver al resto del equipo que peleará por ellos, aun a riesgo de acabar en el suelo. Cuando el delantero centro se entrega de esta manera, envía un mensaje a los demás para que muestren el mismo grado de compromiso», concluye nuestro experto.