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Cómo Wilson se enamoró de la dirección técnica
El camino de Wilson hasta los banquillos fue complicado, puesto que a partir de los doce años ya no pudo seguir jugando al fútbol. Con quince años lo retomó como entrenadora de su hermano menor y, más tarde, se formó como personal sanitario. Poco antes de finalizar su formación, el New South Wales Soccer la contrató en calidad de responsable de participación femenina, un cargo que le abrió las puertas del ámbito administrativo del fútbol. A medida que fue progresando por los distintos niveles de la AFC, siguió ejerciendo como entrenadora en calidad de voluntaria, lo que le reportó una profunda comprensión de cómo funciona el fútbol tanto dentro como fuera del terreno de juego.
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Los objetivos de la División de Fútbol Femenino de la FIFA
Gracias a su cargo en la División de Fútbol Femenino de la FIFA, Wilson ha encabezado los esfuerzos para promover el fútbol femenino en todo el planeta. Según cuenta, la labor de esta división se centra principalmente en desplegar en todo el mundo la Estrategia de Fútbol Femenino de la FIFA, que se compone de cinco pilares individuales. Wilson participa directamente en dos de ellos. A su vez, cada uno de estos pilares está asociado con acciones concretas, y el Departamento de Desarrollo del Fútbol Femenino de la FIFA emprende un esfuerzo firme y decidido para ponerlas en marcha en las federaciones miembro y en el fútbol en su conjunto.
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El programa de mentores de la FIFA para entrenadoras
Asimismo, Wilson participa en el programa de mentores para entrenadoras, en el que se empareja a 20 mentores con 20 participantes procedentes de todo el mundo. En lugar de centrarse en la enseñanza de los aspectos técnicos (que se pueden abordar en las reuniones individuales con las participantes), el objetivo de este programa es crear una comunidad que ofrezca capacitación y orientación a las jóvenes entrenadoras a medida que se enfrentan a nuevos desafíos. Además, con este programa se busca inculcar en las entrenadoras una mentalidad que les ayude a sobresalir en las competiciones de máxima categoría. Asimismo, se trata de animar a las participantes a adoptar enfoques de entrenamiento creativos y adaptados al fútbol femenino.
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Otras maneras de respaldar el fútbol femenino
Esta no es la única iniciativa de la FIFA destinada a brindar apoyo al fútbol femenino. Como entrenadora, Wilson conoce de primera mano las dificultades económicas a las que se enfrentan muchas mujeres que aspiran a dedicarse a la dirección técnica. Ganarse la vida como entrenadora puede resultar difícil, y la FIFA ofrece financiación a través de su programa de becas de formación para entrenadoras. La FIFA también invierte de forma ininterrumpida a fin de crear estructuras integradas que permitan a las entrenadoras, jugadoras y árbitras progresar desde el fútbol base hasta la élite. Las federaciones tienen distintas necesidades, y la FIFA trata de encontrar soluciones individuales siempre que sea necesario.
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Los retos a los que se enfrenta el fútbol femenino
Para Wilson, un gran problema a nivel mundial es la falta de estructuras de desarrollo para entrenadoras y futbolistas, junto con las dificultades a las que se enfrentan las mujeres a la hora de acceder a oportunidades de desarrollo en las federaciones nacionales. El fútbol femenino se está profesionalizando rápidamente, pero las entrenadoras tienen dificultades para encontrar trabajo en este nuevo entorno profesional, una situación que no mejorará a menos que se les brinden oportunidades para desarrollar sus capacidades. Asimismo, determinadas regiones se enfrentan a sus propios retos. Como señala Wilson, coordinar la labor de desarrollo nacional en su Australia natal (cuya superficie terrestre es del tamaño de Europa) puede resultar una tarea titánica.