Velocidad del juego 5: La belleza minimalista del fútbol al primer toque - FIFA Training Centre

Este artículo se centra en una acción que resume todas las cualidades descritas durante la serie y que puede ser un punto de inflexión que cambia el curso de un partido, ya que influye tanto en la velocidad del juego como en el resultado del encuentro. Puede ser un solo instante en el que simplicidad, imprevisibilidad y gran creatividad se combinan para dejar una estampa de inteligencia futbolística y compenetración. Estamos hablando, por supuesto, de la belleza minimalista del fútbol al primer toque. No hay mejor muestra de excelencia, conocimiento y dominio técnicos que un buen pase al primer toque. Es también un regalo visual de armonía individual y colectiva, del fútbol entendido como un arte, y una clara indicación de que hay un futbolista que posee un conjunto completo de habilidades y que es capaz de demostrarlas con una sola acción, aparentemente sencilla.

Para ser claros, no se trata de un pase al primer toque de un jugador que se limita a devolver la pelota por indolencia o falta de confianza, ni tampoco de jugar con el pasador sin intentar buscar espacios o interpretar los movimientos de los compañeros para crear mejores oportunidades.

En realidad, hablamos de momentos de calidad futbolística pura en los que un pase al primer toque es el resultado final de una serie de cualidades que hemos comentado en esta serie de artículos y que tienen que ver con el tiempo que un futbolista pasa con el balón y cómo influye en la velocidad del juego. Las cualidades clave convergen en una fracción de segundo para expresarse como una forma de arte minimalista.

En este artículo, veremos dos acciones que ilustran ese minimalismo futbolístico llevado al más alto nivel. El primer vídeo es de un partido que enfrentó a Inglaterra y Países Bajos en la Copa Mundial Femenina Sub-20 de la FIFA™.

(1) La jugada empieza en la central derecha de Inglaterra (dorsal 14), que se prepara para enviar un pase en diagonal de entre 25 y 30 metros a la derecha (por delante de la línea de centrocampistas) hacia el espacio libre que queda en el triángulo que forman tres jugadoras neerlandesas. La extremo derecha de Inglaterra, la protagonista de nuestra acción, aparece en la parte inferior derecha de la imagen, ligeramente perfilada hacia el interior y a la altura de la última línea defensiva rival.

(2) En la fracción de segundo que transcurre desde que la central inicia el movimiento del pase hasta que toca la pelota, la número 7 de Inglaterra corre 5 metros hacia el interior para colocarse por delante de la línea defensiva.

(3) Cuando recibe el pase, se encuentra en medio del triángulo de 5 metros que forman las jugadoras de Países Bajos.

(4) A continuación, cambia la dirección del balón con un pase vertical al primer toque, de derecha a izquierda y por detrás de la línea defensiva.

(5) El resultado es un pase hacia la trayectoria de la compañera que llega en carrera: el final perfecto para un movimiento precioso. Lamentablemente, el remate final no estuvo a la altura de la maravillosa acción de la extremo derecha de Inglaterra.

Copa Mundial Femenina Sub-20 de la FIFA™: Inglaterra – Países Bajos

Si repasamos la acción para ver este momento de minimalismo futbolístico, podemos apreciar muchas cualidades que permiten sacar el máximo partido de situaciones técnicas. Son cualidades que, de hecho, se esconden tras el minimalismo del fútbol al primer toque, ya que, detrás del proceso de toma de decisiones y de la acción técnica que conduce a un resultado aparentemente sencillo, hay una gran inteligencia futbolística y una creatividad que no solo aceleran el juego, sino que también generan una clara ocasión de gol. A continuación, mostramos el resumen de un proceso que es totalmente transparente, pero que no se ve de manera tan obvia:

Percepción posicional: (imagen 1) si nos fijamos en la número 7 de Inglaterra (parte inferior derecha), podemos ver que tiene una idea clara de sus coordenadas respecto a la línea defensiva de Países Bajos. Al girar, se perfila ligeramente hacia el interior para poder acelerar detrás de la línea. Esa opción está activada (imagen 2). También parece evidente que la lateral izquierda de Países Bajos ve el peligro y se prepara, perfilándose hacia su portería, para emprender una carrera por detrás de la número 7 de Inglaterra, que obviamente es consciente de esa posición (imagen 3).
Percepción periférica: la delantera de Inglaterra se encuentra en medio de la línea defensiva y cruza el campo de izquierda a derecha, girándose hacia la portería y preparándose para librarse de su marcadora y rematar. La número 7 de Inglaterra ha visto esa jugada y la ha integrado en su proceso de toma de decisiones (imagen 4).
Percepción espacial: la número 7 de Inglaterra mira hacia la central de su equipo que tiene el balón y descubre un espacio libre en el centro del triángulo que forman tres futbolistas de Países Bajos (imagen 5).

Imagen 1: La número 7 de Inglaterra tiene una idea clara de sus coordenadas respecto a la línea defensiva de Países Bajos.

Imagen 2: Al girarse, se perfila ligeramente hacia el interior para poder acelerar detrás de la línea.

Imagen 3: La lateral izquierda de Países Bajos ve el peligro y se prepara para emprender una carrera por detrás de la número 7 de Inglaterra.

Imagen 4: La delantera inglesa se encuentra en medio de la línea defensiva y cruza el campo de izquierda a derecha.

Imagen 5: La número 7 de Inglaterra descubre un espacio libre.

Anticipación y atención: prevé que la central de su equipo habrá intuido su movimiento y es consciente de los dos pasos atrás que da la lateral izquierda de Países Bajos; a continuación, aprovecha el hueco que ha detectado acelerando ligeramente hacia el interior y colándose en el espacio abierto entre las jugadoras rivales. Ese estado de atención le da 5 metros de ventaja antes de que la lateral izquierda neerlandesa reaccione para defender su movimiento (imagen 6). Su atención e intensidad le permiten ser la primera en llegar al pase, aunque hay tres jugadoras neerlandesas presionándola (imagen 7).

La fracción de segundo que transcurre entre el movimiento al espacio y la conexión con el balón debe ser puesta en perspectiva. En primer lugar, evalúa el movimiento hacia atrás de la lateral neerlandesa, que le da una ligera ventaja para llegar antes al balón. Al mismo tiempo, gracias a su percepción periférica, tiene una imagen visual de la delantera de su equipo que cruza el campo a la carrera entre las dos centrales de Países Bajos. Por último, tiene una imagen mental del lugar preciso donde la delantera puede recibir su pase. Está atenta y en tensión, analizando toda la información de la jugada, y preparada para hacer un gesto técnico de gran creatividad incluso antes de tener contacto con el balón.

Imagen 6: La delantera de Inglaterra parte con ventaja.

Imagen 7: Las futbolistas de Países Bajos presionan a la delantera inglesa.

Imagen 8: Aprovecha la velocidad de la pelota a la perfección con una ligera extensión de la pierna derecha y un pequeño giro con el pie.

Imagen 9: El balón recorre 60 metros a gran velocidad y con solo dos toques.

Coordinación técnica: parece algo tan sencillo y preciso como una flecha que se clava en una diana, pero detrás de este minimalismo hay una gran coordinación técnica. En primer lugar, la jugadora se acerca a recibir la pelota con velocidad, pero en el último momento, se frena en seco para domar un balón que viene rápido y botando ligeramente (imagen 7). Sin perder la compostura, y con tres futbolistas neerlandesas acechando, ajusta perfectamente su colocación a la velocidad de la pelota con una ligera extensión de la pierna derecha y un pequeño giro con el pie, aprovechando la fuerza del pase para dirigir el balón con el exterior hacia su compañera.

Mira con orgullo el resultado de su bonita maniobra mientras la jugada continúa (imagen 8). Es un ejemplo maravilloso de plenitud futbolística y velocidad de juego. El resultado final de una acción meditada y difícil de ejecutar es que el balón recorre 60 metros a gran velocidad y con solo dos toques. En menos de cuatro segundos, la ocasión está servida en bandeja y solo falta enviar la pelota al fondo de las mallas. La número 7 de Inglaterra se las arregla para crear una jugada de ataque sin necesidad de mirar hacia delante.

Copa Mundial de la FIFA 2018™: Francia-Argentina

Nuestro segundo vídeo es del partido que enfrentó a Francia y Argentina en los octavos de final de la Copa Mundial de la FIFA 2018™. Es un ejemplo de un movimiento de gran dominio y calidad técnica que inclina la balanza para dar ventaja a un equipo en una jugada aparentemente sencilla a primera vista.

(1) La acción empieza con el balón en los pies del centrocampista más retrasado de Francia, que se encuentra al borde del círculo central y avanza hacia su izquierda. El protagonista del vídeo es el volante izquierdo de Francia, que está de medio lado y listo para entrar en acción.

(2) Cuando el mediocentro avanza, el volante izquierdo da unos pasos hacia atrás y ve que otro compañero, el lateral izquierdo, recorre su banda a la carrera para entrar por detrás de la línea defensiva en la zona de tres cuartos.

(2a) También puede ver al volante derecho rival galopando hacia atrás para tapar la carrera del lateral izquierdo.

(3) Justo antes de pasar el balón al volante izquierdo, el mediocentro amaga con irse hacia la derecha, lo que atrae la atención del centrocampista rival más cercano y deja un poco más espacio para el volante izquierdo.

(3a) Al ver esta maniobra, el volante francés aprovecha para alejarse lateral y verticalmente, y se perfila para ampliar la distancia respecto al compañero que tiene el balón y al centrocampista adversario más cercano.

(4) La siguiente secuencia de acciones es poesía minimalista en términos futbolísticos. Mientras le llega el balón, el volante de Francia continúa su movimiento lateral, lo que mantiene alejado al medio adversario, que no puede cortar la línea de pase.

(4a) El lateral izquierdo francés permanece a la espera, pero sigue perfilado hacia adelante, preparado para correr mientras mira a su compañero para intuir cuándo debe arrancar.

(5) El volante izquierdo de Francia sigue abriendo el campo, deja correr el balón por delante de él y levanta la cabeza para calcular las coordenadas de pase. Esa es la señal que activa al lateral izquierdo, ya que le indica que su compañero va a enviarle un pase al primer toque.

(6) El volante izquierdo, que mantiene la cabeza levantada, se mueve rápido para alcanzar el balón y, sin llegar a pararlo, da un pase al primer toque con la pierna izquierda.

La secuencia es un bonito ejemplo de atención, dominio y técnica; una interacción coordinada entre cuerpo y mente. Los pequeños detalles provocan indecisión defensiva al tiempo que desencadenan una acción ofensiva. El resultado: un gran gol.

(5) Si retrocedemos hasta el punto exacto de activación de la jugada, vemos que el volante izquierdo de Francia deja correr el balón y esa es la señal que espera el lateral izquierdo para iniciar la carrera antes de que su compañero haga el pase.

(5b) El contraste con la actitud del volante derecho rival es evidente, ya que se encuentra en un momento de indecisión, de cara a la portería.

De hecho, al dejar correr el balón, el volante francés gana tiempo para que el lateral izquierdo se anticipe al centrocampista de Argentina, que tarda un poco más en reaccionar. Hipotéticamente, si el volante izquierdo de Francia hubiera controlado el balón antes de pasarlo, no solo habría dado tiempo al centrocampista argentino para ajustar su posición, girarse y pelear por la pelota, sino que también hubiera retrasado el desmarque en carrera del lateral izquierdo. Esa mínima ventaja se hubiera perdido, ya que el margen de error era mínimo.

(5c) En la imagen del instante decisivo también aparece el lateral derecho rival, que observa el balón en poder del centrocampista de Francia a la vez que hace la intención de defender la jugada que se desarrolla en su banda.

(7) El pase al primer toque también le ha dejado sin tiempo para pensar, por lo que solo reacciona con determinación cuando ve que el balón ya ha salido del adversario y que su compañero está en desventaja.

(6a) Por último, al dejar correr el balón y dar el pase al primer toque, el volante francés deja al centrocampista rival sin opciones de cortar la jugada...

(8) ... y puede colocarse para dar un pase vertical a la espalda de la línea defensiva y a la carrera del lateral izquierdo: un precioso gesto técnico que no debemos pasar por alto.

La intensidad defensiva fue la adecuada, pero los pequeños detalles que dan velocidad al juego dejaron a los defensas sin algo que todos quieren: el tiempo para tomar una decisión.

Los ejemplos anteriores demuestran que un pase al primer toque no es solo un ejemplo de técnica maravillosa, sino que también es el producto final de un análisis instantáneo de la situación de la jugada, lo que conocemos como «inteligencia futbolística» o «inteligencia sobre el campo». No todos los pases al primer toque son tan decisivos como los de nuestros ejemplos, pero sin las cualidades individuales que hemos explicado en esta serie, muchas oportunidades de cambiar el rumbo de un partido con un solo toque se perderían sin que los futbolistas se dieran cuenta. ¿Por qué? Porque a veces falta alguno de los elementos necesarios para leer el juego y actuar en consecuencia, ya sea la visión, la percepción, el equilibrio técnico, una mente creativa o la confianza.

Un buen ejemplo lo tenemos en el primer vídeo protagonizado por la número 7 de Inglaterra. ¿Habría tenido el atrevimiento de dar ese fantástico pase al primer toque con el exterior del pie derecho si fuera zurda cerrada? Probablemente no, porque aunque hubiera visto la oportunidad, le hubiera faltado la confianza necesaria para hacerlo. Las carencias técnicas con la pierna izquierda podrían haber impedido dibujar la jugada en su cabeza, limitando sus opciones de jugar el balón.

El fútbol moderno está obsesionado con los sistemas, las tácticas y los estilos de juego, tanto en ataque como en defensa, y todo con el objetivo de crear o desbaratar ocasiones de gol. Pero para tener una influencia real en el juego, todos esos elementos necesitan que los fundamentos, esos conceptos esenciales del fútbol, se conviertan en reflejos instintivos de los jugadores. Las cualidades individuales que hemos visto en esta serie son meros catalizadores de las esencias del fútbol, algo que los mejores equipos y jugadores tienen en abundancia. Cuando se manifiestan, asistimos a momentos de calidad individual y colectiva. Cuando no están presentes, vivimos momentos de desorden individual y colectivo.

Alessia Russo, futbolista de Inglaterra, dio el pase al hueco de nuestro primer ejemplo

Muchas de las cualidades que forman este conjunto completo de habilidades y que culminan con un gran pase al primer toque se han destacado y explicado en los artículos 2, 3 y 4. Si quieres repasar los puntos clave de esas cualidades, consulta los siguientes artículos.

Artículo 2: Atención y anticipación: la chispa necesaria para ir un paso por delante de la jugada

Artículo 3: Percepción espacial, posicional y periférica (PEPP): los fundamentos para comprender las situaciones del juego y aplicar los conocimientos tácticos

Artículo 4: Conocimientos técnicos y coordinación: los conceptos básicos del fútbol, la calidad técnica, la creatividad y la eficacia

Este artículo repasa los aspectos e ideas que hay que tener en cuenta para dar pases al primer toque con calidad y eficacia. Gracias al conocimiento del juego se pueden detectar y aprovechar las oportunidades de emplear los recursos técnicos, pero la calidad técnica (el pase) es el factor primordial. Se puede tener toda la inteligencia futbolística del mundo, pero vale de poco si no se complementa con la necesaria calidad técnica. Teniendo esto en cuenta, hay algunos aspectos clave que pueden incluirse dentro del programa general de desarrollo para ayudar a los jugadores jóvenes a alcanzar su máximo potencial de pase al primer toque, así como mejorar la calidad y la confianza en el pase de los futbolistas más desarrollados.

Para los jugadores jóvenes en desarrollo, trabajar los fundamentos significa optimizar su potencial, como hemos visto en artículos anteriores. Se trata de priorizar, ser constantes y entrenar las cualidades esenciales haciendo muchas repeticiones. Puede parecer obvio pero, para conseguir calidad en el pase al primer toque, es fundamental seguir de forma regular y estructurada los protocolos del juego al primer toque del programa de desarrollo técnico, que incluye ejercicios con balón (sin oposición) y ejercicios de posesión centrados en jugar a un solo toque. Estos ejercicios se deben repetir regularmente, y también se debe destacar su importancia. No es buena idea dedicarles cinco minutos de vez en cuando y esperar grandes resultados. Es evidente que los futbolistas jóvenes disfrutan mucho jugando por libre, pero a la larga, seguir una estructura creada para desarrollar los fundamentos les hará disfrutar aún más.

Los ejercicios de entrenamiento del pase al primer toque, estructurados y realizados de forma regular, ayudan a desarrollar los fundamentos de los jóvenes jugadores

Puntos a tener en cuenta para implementar un protocolo de entrenamiento estructurado

1. Ejercicios de pase sin oposición y de coordinación técnica siguiendo estos principios

Sobrecarga técnica: en grupos de 4 a 6 jugadores, con mucho contacto de balón para fomentar un proceso de aprendizaje regular.
Equilibrio técnico: misma carga de trabajo para recibir y pasar al primer toque con ambas piernas.
Amplia variedad de movimientos y situaciones de pase al primer toque.

Incluir: los siguientes ejercicios se hacen al primer toque; el número de repeticiones es el mismo con la pierna izquierda que con la derecha

De medio lado, dejar correr el balón y pasarlo hacia delante, hacia la izquierda o hacia la derecha.
De espaldas a la jugada, recibir el balón con un pase raso con el interior del pie, hacia la izquierda o hacia la derecha.
De espaldas a la jugada, recibir el balón con un pase al hueco con el exterior del pie, hacia la izquierda o hacia la derecha.
De espaldas a la jugada, recibir el balón con un pase al hueco hacia atrás, o en diagonal hacia la izquierda o hacia la derecha.
De cara a la jugada, recibir un pase retrasado y acercarse para pasar el balón hacia la izquierda o hacia la derecha.
De cara a la jugada, recibir un pase retrasado desde la izquierda o la derecha y acercarse para pasar el balón hacia la izquierda o hacia la derecha.
De cara a la jugada, recibir un pase retrasado desde la izquierda o la derecha, frenarse, dar media vuelta y cambiar el juego al otro lado.
En línea con la jugada, dejar correr el balón que viene de un pase lateral y pasarlo hacia delante, hacia la izquierda o hacia la derecha.
Partiendo por detrás de la jugada, hacer una aceleración al espacio para recibir un pase diagonal que viene de la izquierda o la derecha, y pasar el balón en diagonal hacia la izquierda o hacia la derecha.

Los mejores futbolistas del mundo han desarrollado unos reflejos instintivos que les ayudan a tomar decisiones correctas

Los ejercicios anteriores son patrones habituales de pase y movimiento que pueden ser un punto de partida para desarrollar y reforzar la calidad, la consistencia y la eficacia de los pases al primer toque, con una carga idéntica en ambos pies para que los jugadores se sientan cómodos usando cualquiera de ellos. En estos ejercicios se pueden incluir otros tipos de pases y movimientos, así como variar el número de toques permitidos, pero el objetivo principal de las rotaciones debe ser el pase al primer toque. Los ejercicios de pase también tienen que incluir lo siguiente:

Acercarse o alejarse del balón: estar siempre atentos.
Ejercicios sencillos dentro de cada patrón de pase para crear o reforzar el hábito de levantar la cabeza, girarse para ver la posición de los jugadores en el campo y la zona donde se quiere enviar el balón. Si se realizan de forma adecuada y constante, trabajando con las secuencias correctas y con un número elevado de repeticiones, estos ejercicios contribuirán a desarrollar un reflejo instintivo natural que, a medida que el jugador madure, le permitirá tener un mayor conocimiento del juego.
Fases a un ritmo más relajado (1-2 minutos) para concentrarse en la calidad del movimiento y en el orden de las acciones.
Fases de ritmo intenso (1-2 minutos) para intentar trabajar todos los elementos del ejercicio a gran velocidad.
Distancias de pase de entre 5 y 15 metros para mejorar la consistencia y mantener la fluidez del ejercicio.
Distancias de pase de entre 20 y 30 metros para desarrollar la consistencia en espacios más grandes.
El balón debe moverse en una rotación continua para aprovechar el tiempo al máximo y aumentar el contacto con la pelota.

La calidad del pase al primer toque es fundamental para acelerar el juego

2. Ejercicios de posesión al primer toque

Distintas situaciones e intervalos cortos para mantener la concentración que requiere pasar el balón al primer toque y permitir la recuperación total entre periodos de trabajo.

Posesión libre con cortos intervalos al primer toque; por ejemplo, 30 segundos o 1 minuto.
Desigualdad (ventaja numérica) e intervalos cortos; por ejemplo, 1 minuto x 5 contra 2/ 6 contra 3. Más fácil para jugar a un toque.
Desigualdad (ventaja numérica) e intervalos cortos; por ejemplo, 1 minuto x 5 contra 2/ 6 contra 3. Solo se puede usar la pierna menos hábil.
Desigualdad (ventaja numérica) e intervalos cortos; por ejemplo, 1 minuto x 5 contra 2/ 6 contra 3. Hay que ver la posición de los jugadores en el campo.
Desigualdad (ventaja numérica) e intervalos cortos; por ejemplo, 1 minuto x 5 contra 2/ 6 contra 3. No se puede devolver el balón directamente al pasador.
Igualdad numérica e intervalos cortos; por ejemplo, 1-2 minutos, más 1 o 2 jugadores dentro del área que pueden ayudar a ambos equipos. Se anima a analizar la situación de la jugada para obtener más información.
Igualdad numérica, intervalos cortos y grandes espacios para aumentar la percepción espacial.
Igualdad numérica, intervalos cortos, espacios reducidos para aumentar la atención y movimiento para crear espacios y utilizar ambos pies.

Los jugadores más desarrollados también pueden mejorar el pase al primer toque; solo tienen que priorizar el tiempo que se dedica a este aspecto del juego en los entrenamientos.

Entre los ejercicios de entrenamiento recomendados, podemos incluir los siguientes:

Ejercicios de coordinación y técnica de pase sin oposición. A diferencia de lo que ocurre con los jugadores jóvenes, estos ejercicios no forman parte de un programa de desarrollo, sino que son un calentamiento de activación técnica eficaz que prepara a los futbolistas para el entrenamiento de alta intensidad, a la vez que refuerza la calidad de los pases al primer toque.
En los juegos de entrenamiento, hacer intervalos cortos de alta intensidad en espacios reducidos, insistiendo en pasar el balón al primer toque. Así se consigue aumentar la atención y mejorar la velocidad de movimiento en esos espacios. También se aprende a crear espacios, fomenta la toma de decisiones rápida y el uso de ambas piernas.
En los partidos de entrenamiento, hacer intervalos cortos de alta intensidad en espacios abiertos, insistiendo en pasar el balón al primer toque. Así se obliga a los futbolistas a ser más creativos y a buscar pases más largos.
Posesión al primer toque en espacios reducidos, que estimula la percepción y la velocidad del juego de pies, así como el uso de ambas piernas.
Posesión al primer toque con gran ventaja numérica, pero los jugadores solo pueden usar su pierna menos hábil.
Posesión al primer toque con gran ventaja numérica, pero no valen los pases que se dan sin antes haber analizado las posiciones en el terreno de juego. Se estimula la percepción.
Posesión al primer toque con el mismo número de jugadores, lo que refuerza la necesidad de analizar el terreno de juego con más frecuencia.
Posesión al primer toque, pero no se permite devolver el balón directamente al pasador, lo que refuerza la necesidad de analizar el terreno de juego con más frecuencia.
Posesión al primer toque con grandes espacios, mismo número de jugadores y futbolistas que pueden ser utilizados por ambos equipos en una zona del campo determinada. Estimula la visión periférica de los jugadores.

Todas las situaciones anteriores demandan un mayor nivel de concentración, atención y velocidad para buscar y crear espacios, así como un uso más intenso de los sentidos para encontrar soluciones técnicas. Todos los ejercicios impulsan la calidad del pase al primer toque.