En esta edición de la serie sobre fundamentos para entrenadores de fútbol base, la Dra. Jené Baclawski explica cómo planificar calentamientos que sean divertidos y eficaces a la vez, y expone tres principios básicos para sacar el máximo partido de cada calentamiento: la importancia de que sea atractivo, de aprovechar el tiempo para desarrollar habilidades y de conseguir siempre que los jugadores se lo pasen bien. Para ilustrar estos principios, presenta tres ejemplos prácticos dirigidos a jugadores de cuatro a ocho años.
En el vídeo que figura a continuación, Jené explica detalladamente los principios básicos y cómo ponerlos en práctica. Tras el vídeo, se incluye un resumen de esos principios, acompañado de gráficos que desglosan cada ejercicio de ejemplo. Esperamos que sean de utilidad.
Primer principio: Hacer calentamientos atractivos
Para que la sesión sea positiva, el calentamiento debe ser dinámico y entretenido, y mantener a todos los jugadores activos e implicados. Estas son las claves para que un calentamiento sea interesante:
- Mantener activos a los jugadores: se debe optar por juegos de ritmo rápido que reduzcan al mínimo los tiempos muertos y atraigan rápidamente la atención de los jugadores, como el pillapilla o ejercicios sencillos con balón.
- Fomentar la creatividad: conviene dejar que los niños elijan opciones e incorporen sus propias ideas; de este modo desarrollan su capacidad de resolución de problemas y se estimula su creatividad.
- Adaptarse a las necesidades de los participantes: hay que adaptar la dificultad de los ejercicios a la habilidad de los jugadores para que todos se sientan cómodos y motivados.
Segundo principio: Incluir el desarrollo de habilidades
El calentamiento no solo sirve como preparación física, sino que también brinda una excelente oportunidad para practicar destrezas básicas de forma atractiva. A continuación se explica cómo hacer que el calentamiento sea útil para el desarrollo de habilidades:
- Mejorar la motricidad: es preciso incluir ejercicios de coordinación y cambios de dirección para mejorar el desarrollo físico y la agilidad de los jugadores.
- Hacer pensar a los niños: se deben preparar ejercicios de calentamiento que obliguen a los jugadores a pensar y a tomar decisiones con rapidez para mejorar la concentración y la velocidad de reacción.
- Aumentar la confianza: los entrenadores deben procurar que los jugadores tengan el máximo contacto posible con el balón durante los ejercicios de calentamiento, lo que ayuda a reforzar su confianza con la pelota en los pies.
Tercer principio: Crear un entorno divertido
Hacer calentamientos entretenidos es fundamental para mantener a los jugadores jóvenes motivados y fomentar su pasión por el fútbol. En esta sección, Jené explica cómo crear un ambiente divertido y positivo:
- Fomentar el trabajo en equipo: se deben incluir ejercicios que promuevan la comunicación y la cooperación, lo que permite que los jugadores forjen amistades y un espíritu de compañerismo.
- Añadir la competición: incluir elementos competitivos, como carreras de relevos, sirve para mantener la ilusión y la motivación de los jugadores, al tiempo que favorece el desarrollo de una sesión intensa y positiva.
- Variar los ejercicios: hay que renovar periódicamente los ejercicios de calentamiento e incluir nuevos retos para evitar la monotonía y mantener el interés de los jugadores.
Conclusiones principales
La presentación de Jené y los principios básicos que detalla ayudarán a los entrenadores a comprender la importancia que tiene hacer calentamientos divertidos y eficaces para los jugadores jóvenes. Sus conclusiones se resumen a continuación:
- Desarrollo de la coordinación: animar a los niños a participar en juegos de ritmo rápido favorece el desarrollo de habilidades motrices como la agilidad y la velocidad.
- Mejora de la capacidad cognitiva: los ejercicios de calentamiento que exigen rapidez mental y velocidad de reacción desempeñan un papel fundamental en la mejora de la toma de decisiones de los jugadores sobre el terreno de juego.
- Fortalecimiento del grupo: participar en actividades de equipo ayuda a crear un ambiente positivo y solidario que permite entablar amistades y reforzarlas con el tiempo.
- Fomento de un entorno positivo: crear un ambiente acogedor y positivo es fundamental para que los niños de estas edades mantengan el interés y la motivación durante toda la sesión.