Desde que inició su etapa como técnico en 2014, Angulo ha trabajado con varias categorías inferiores del Valencia y fue segundo entrenador del primer equipo durante la temporada 2015-16. Esa trayectoria le da una perspectiva clara sobre la evolución de la cantera desde sus años como jugador, y le permite analizar de cerca los retos concretos que afrontan los jóvenes hasta llegar al primer equipo.
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Primera parte: la formación de Angulo como jugador
Angulo comienza la entrevista con una comparación entre la academia en la que trabaja actualmente y los sistemas de formación que conoció como jugador en el Valencia y el Sporting de Gijón. Aquellas canteras gozaban de prestigio en su época, pero en la realidad formaban a una generación de futbolistas de calle, sin los recursos, el respaldo científico ni la tecnología que ofrecen los centros de entrenamiento actuales. También subraya la importancia de las convocatorias con la selección juvenil, que, según él, fueron decisivas para despertar su instinto competitivo y sacarlo de su zona de confort.
Segunda parte: el apoyo a futbolistas y entrenadores
No todos llegarán al fútbol profesional, y Angulo lo sabe. Por eso su labor no se limita a entrenar, sino que trata de darles a sus jugadores las herramientas para rendir al máximo y, al mismo tiempo, inculcar valores como el esfuerzo y la fortaleza mental. El fútbol no perdona. Es un deporte duro, lleno de altibajos, y los jóvenes deben estar preparados para afrontarlos. Mientras acompaña el crecimiento de sus jugadores, Angulo también trabaja en su propia evolución como técnico, con el respaldo total del club. Está convencido de que un entrenador nunca debe dejar de aprender.
Tercera parte: la transición al primer equipo
Angulo cierra la entrevista explicando cómo el Valencia guía a sus jugadores hacia el primer equipo. En las primeras etapas, la prioridad está en que los más jóvenes disfruten en el campo. Las habilidades técnicas y tácticas se introducen de forma progresiva, a medida que los jugadores maduran. Los que más destacan llegan al juvenil A o al Valencia B. A partir de ahí, el objetivo es ofrecerles las oportunidades necesarias para dar el salto al primer equipo. Cuanto antes lo consigan, más rápido será su desarrollo.